Cuando yo tenía ocho años fui a México a visitar a mi familia. Mis abuelos viven en la ciudad que se llama Durango. Se trata de un barrio pobre de México, pero eso no me molesta. Encontré cosas que hacer para mantener mi ocupada. Me despertaba cada mañana a las cinco para ayudar a mi abuela la leche de las vacas. Me encantó su ayuda. Una cosa que nunca olvidaré es cuando ayudaba a mi abuelo matar a un cerdo. Sé que suena terrible, pero en el momento pensé que era fascinante. Nos preparó el cerdo y se lo comió. También me acuerdo de ir al pozo a lavar la ropa con una tabla de lavar. Siempre he pensado que lavar la ropa fue muy divertido. Echo de menos a mis abuelos mucho. No los he visto en trece años. Espero poder visitarlos pronto. Tengo fotos de cuando yo estaba allí, pero voy a tener que enviarlas más tarde. Las fotos están en casa de mis padres.

cuidar,
Claudia Gleason